

Juan Meza
El Buen Tono
ATOYAC.- Hay preocupación por parte de los pobladores y ambientalistas por la acelerada destrucción del “Cerro del Chiquihuite”, debido a que la empresa que se instaló para extraer minerales utilizados para fabricar materiales de construcción, regresó a sus operaciones hace unos meses.
Pese a que hace un año fue clausurada por la Procuraduría Estatal de Protección al Medio Ambiente de Veracruz, actualmente han retomado operaciones y han acabado con gran parte del cerro donde trabajan a marchas forzadas.
Lamentablemente, este daño irreversible que altera el ecosistema natural tendrá impacto directo en la fauna y en la captación del agua que alimenta los ríos y los mantos acuíferos.
El emblemático cerro forma parte de la historia que entrelaza a municipios de esta zona cañera, refugio de diversos factores que forman parte de lo que es actualmente México, poco a poco han ido terminando con él al extraer grandes cantidades de minerales que lo conforman, sin que haya mano dura de parte de las autoridades
correspondientes.
