

AGENCIA
California.- El diputado federal de Morena, Arturo Ávila, se encuentra en el centro de una controversia tras la adquisición de una mansión valuada en 4.8 millones de dólares en Rancho Santa Fe, California, una de las zonas más exclusivas de Estados Unidos, donde han residido figuras como Bill Gates y Arnold Schwarzenegger.
La compra, realizada en marzo de 2024 mediante una hipoteca, coincidió con el congelamiento de cuentas bancarias de su empresa, IBN Industrias Militares, por presuntas irregularidades en contratos gubernamentales.
La investigación de Mexicanos Contra la Corrupción y la Impunidad reveló que IBN Industrias Militares, empresa de Ávila, obtuvo contratos millonarios con diversas entidades gubernamentales, incluyendo la Secretaría de Salud del Estado de México y el municipio de Aguascalientes, por la venta de insumos médicos y mantenimiento de vehículos. Además, se destacó su asociación con Carlos Emiliano Salinas Occelli, hijo del expresidente Carlos Salinas de Gortari, en la empresa Prorsus Capital.
En la misma exclusiva comunidad de Rancho Santa Fe, medios de Baja California reportaron que una mansión habría sido ocupada por la gobernadora Marina del Pilar Ávila, también de Morena. Estas coincidencias han generado cuestionamientos sobre el estilo de vida de algunos políticos del partido, contrastando con los principios de austeridad que promueven públicamente.
Estos casos han reavivado el debate sobre la congruencia entre el discurso y las acciones de los representantes de Morena, especialmente en lo que respecta al manejo de recursos públicos y la transparencia en sus actividades financieras.
