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DOS BOCAS

Superiberia

Por Andrés Timoteo / columnista

DOS BOCAS

Uno de los grandes proyectos de la “Cuarta Transformación” que están en riesgo es la refinería de Dos Bocas, Tabasco, aunque no únicamente por la sacudida económica que se registrará si Estados Unidos impone los aranceles a las exportaciones sino por la mala conducción, el empecinamiento y la impericia con el que se lleva y que el domingo, 2 de junio, inició formalmente su construcción.

A pesar de que el Presidente y algunos de sus colaboradores, especialmente la secretaria de Energía, Rocío Nahle, no lo quieron aceptar, el proyecto “hace agua” porque literalmente se edificará sobre un pantano. De hecho, el acto oficial de su arranque tuvo que ser cambiado a la terminal portuaria de Dos Bocas porque el terreno sede estaba inundado por las lluvias recientes. Además, no se tienen todavía los permisos completos y se hará toda una maniobra de complicados vericuetos para obtener la validación ecológica.

Pero lo nodal son los costos, los tiempos y los responsables. El Gobierno Federal insiste en que el complejo debe costar 8 mil millones de dólares y terminarse en tres años, para el 2022, pero los especialistas aseguran que la inversión no será menor a los 10 mil o 12 mil millones de dólares y el tiempo no será inferior a los ocho años, es decir, rebasaría el sexenio lopezobradorista.

Ante la negativa de los cuatro consorcios que presentaron proyectos para hacerse cargo de la construcción para garantizar el costo y el tiempo fijados por el Gobierno mexicano, López Obrador decretó desierta la licitación ¡¡y le encargó la obra a Rocío Nahle!! Vaya despropósito, la zacatecana avecindada en Veracruz carece de conocimientos técnicos, académicos y, por supuesto, científicos para tal empresa.

Basta revisar la currícula que exhibe en la página del Gobierno Federal para comprobar que sólo tiene la ingeniería química por la Universidad Autónoma de Zacatecas y dos diplomados en la UNAM y la UV. De ahí en fuera nada, ni maestría ni doctorado ni posdoctorado que se requerirían, como algo mínimo, para estar al frente de un proyecto de tal envergadura. Es como poner a construir un edificio de veinte pisos a un ayudante de albañil.

¿Cuál será el resultado? Todos lo pronostican negativo en manos de la zacatecana Nahle, quien le vendió un plan fantasioso a López Obrador. A eso se adiciona la intención de utilizarlo como proyecto personal, de corte electoral, porque será el “cochinito” para hacerse de recursos para financiar una supuesta campaña a la gubernatura de Veracruz en el 2024 -claro, si se modifica la Ley para permitir que un personaje ajeno a la Entidad pueda competir por el Gobierno Estatal-.

Aquí se ha dicho, la refinería de Dos Bocas es, quizás, el mejor proyecto del lopezobradorismo para rescatar la independencia energética de la Nación, apostarle a refinar lo que produce el subsuelo mexicano y con ello a reactivar la Nación durante los próximos cien años. Sin embargo, el mismo es presa del voluntarismo unipersonal, de la cerrazón y la distorsión electoral, lo que podría llevar a que fracase. Al tiempo, como dice el clásico.

UN SEMESTRE

El sábado también se cumplió el primer semestre de las Administraciones federal y estatal, la doceava parte de sus sexenios que concluirán en el 2024. Ahora comienza a correr el último tramo para hacer los cambios estructurales y ofrecer los primeros resultados en el ejercicio del poder, ya que a partir de los nueve meses las oposiciones se reagrupan y emprenden el contrataque, según Milton y Rose Friedman, teóricos de quehacer político.

Si no hacen cambios importantes ni actúan con firmeza en este periodo -hasta los 9 meses-, dicen, no se tendrá otra oportunidad temporal igual, porque las fuerzas políticas vencidas -en los comicios- se volverán a movilizar y serán los principales señaladores de lo faltante. Entonces, comienza el plazo fatal para demostrar que sí se sabe gobernar y que los electores no equivocaron su voto.

Y hablando de elecciones, ya se debieron conocer los resultados de los seis comicios efectuados el domingo, entre ellos los extraordinarios para la gubernatura de Puebla. Dichas votaciones son catadoras de la fuerza del lopezobradorismo a un semestre de haberse convertido en gobierno. De estos se hablará en un próximo texto.

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