


De la Redacción
El Buen Tono
Orizaba.- La Clínica Hospital del ISSSTE en Orizaba, espacio que debería ser sinónimo de salud y cuidado, se ha convertido en un foco de insalubridad y riesgo constante debido a la inacción de la administración municipal.
Una vez más, el drenaje sanitario colapso ante la lluvia que se presentó la noche del lunes, provocando que las instalaciones del hospital quedaran desbordadas de agua residuales y olores fétidos, desatando una crisis sanitaria que pone en evidencia la negligencia y la falta de voluntad política para resolver un problema de años.
A pesar de las reiteradas quejas y reportes, la administración de Juan Manuel Diez Francos solo ha dado soluciones superficiales y temporales, en lugar de destinar los recursos y expertos para una rehabilitación integral y definitiva.
La situación es doblemente grave al considerar que el Ayuntamiento de Orizaba cobra puntualmente por el servicio de drenaje y agua potable, y mientras los ciudadanos cumplen con su obligación fiscal, el gobierno municipal fracasa en su responsabilidad de garantizar un mantenimiento adecuado de la infraestructura, lo que resulta no sólo el incumplimiento administrativo, si no un atentado contra la salud pública.

