Drenaje en Dos Ríos: corrupción heredada y negligencia prolongadaTinta Ácida – El Buen Tono
En la comunidad de Dos Ríos, municipio de Atzacan, un grave colapso en la red de drenaje sanitario dejó al descubierto no solo una obra mal hecha, sino también la cadena de corrupción y negligencia de dos administraciones municipales.
El tramo de tubería afectado fue instalado con un desnivel incorrecto durante el gobierno 2019-2021, encabezado por Octavio Misael Lorenzo Morales —quien falleció por COVID-19 en 2021— y continuado por su suplente Héctor Velázquez Sánchez. Esto provocó asentamientos y la obstrucción del flujo de aguas residuales. La obra, que debió ser supervisada y rechazada por no cumplir estándares técnicos, fue autorizada y entregada sin correcciones, dejando latente un riesgo sanitario para la población.
Pero la responsabilidad no termina ahí. El actual presidente municipal, Mario Alberto Vargas Amador, al recibir la administración, conocía de las fallas y no dio seguimiento ni atención oportuna, permitiendo que el problema se agravara. Vecinos señalan que durante más de dos años no hubo acciones correctivas, a pesar de las quejas y evidencias del mal estado del drenaje.
La intervención reciente —un desazolve manual y el uso de un camión vactor recién adquirido— apenas resolvió la emergencia. La reparación definitiva exigirá sustituir 48 metros de tubería, un gasto que se pudo evitar si ambas administraciones hubieran actuado con responsabilidad y sin intereses de por medio.
El caso de Dos Ríos muestra cómo la corrupción de un alcalde que entrega obras defectuosas y la negligencia de otro que no las atiende a tiempo terminan costando caro a la ciudadanía, que paga las consecuencias de una política municipal sin supervisión, transparencia ni compromiso real con el bienestar de la población.
