De la Redacción
El Buen Tono
Tezonapa.- Habitantes de Tlacotepec y Limonestitla están incomunicados, tras la inundación del camino que une a las dos comunidades, acusaron omisión, lo que también es corrupción, de apoyo de las autoridades municipales que preside, Claudia Rosales, para atender la situación.
La inundación en la vía de comunicación dejó a los vecinos aislados, dificulta el transporte de productos, la disponibilidad de servicios esenciales y la movilidad en general.
Los afectados manifestaron que, hasta el momento, se mantienen sin recibir la visita de personal del ayuntamiento para evaluar los daños o implementar soluciones temporales.
La situación se agravó por el hecho de tratarse de un fin de semana, periodo en el que, según denunciaron, la actividad de las dependencias municipales se reduce al mínimo, dejándolos en un estado de abandono ante la emergencia.
La falta de respuesta inmediata generó incertidumbre y malestar entre la comunidad, que se siente ignorada por sus gobernantes.
“Estamos solos. Carecemos de maquinaria, ningún funcionario ha venido a ver la situación, y mucho menos a decirnos qué van a hacer o cuándo piensan arreglarlo”, declaró un vecino.
Ante la falta de protocolos de actuación claros para emergencias en días inhábiles, los ciudadanos exigieron que la administración municipal active de inmediato su plan de contingencias y envíe personal de Protección Civil y Obras Públicas a la zona.
La comunidad espera que la alcaldesa se ocupe del problema que enfrentan antes del martes, “el lunes suspendieron las actividades, pero mientras nosotros enfrentamos las consecuencias del abandono institucional en una situación que consideramos de urgencia”.
