De la redacción
El Buen Tono
Zapopan, Jalisco.– El asesinato del empresario y comerciante del Mercado de Abastos, Alberto Prieto Valencia, conocido como “Don Beto”, junto con su hija adolescente y un escolta, ha generado conmoción en la zona metropolitana de Guadalajara y encendió las alertas por posibles vínculos con actividades ilícitas que operan desde hace años en uno de los centros comerciales más importantes del estado.
El ataque ocurrió cuando Prieto Valencia se desplazaba en una camioneta Lamborghini Urus, acompañado por su hija y personal de seguridad. La emboscada se registró en los límites entre Zapopan y Guadalajara, sobre la avenida Lapislázuli, en el cruce con Bahía, en la colonia Residencial Victoria. Sujetos armados dispararon desde varios vehículos y posteriormente huyeron del lugar.
En el atentado murieron el empresario, su hija y uno de los escoltas. Además, cuatro elementos de seguridad resultaron heridos y permanecen bajo vigilancia médica, de acuerdo con información oficial.
El secretario general de Gobierno de Jalisco, Salvador Zamora, confirmó que existen diversas líneas de investigación, entre ellas la posible relación del empresario con las llamadas rifas colombianas ilegales que operan en el Mercado de Abastos. Señaló que estas versiones han sido documentadas en trabajos periodísticos previos y serán consideradas dentro de la indagatoria.
Desde al menos 2021 se ha reportado la operación de rifas clandestinas en el mercado, en las que se ofrecen supuestos premios en efectivo a cambio de boletos de bajo costo. Estas actividades, según investigaciones periodísticas, han sido financiadas con recursos vinculados al crimen organizado y se han extendido entre locatarios y trabajadores del lugar.
A estas prácticas se suman los llamados préstamos “gota a gota”, señalados por autoridades financieras como esquemas irregulares asociados a extorsiones y cobros abusivos. Aunque la Comisaría de Guadalajara informó que no ha recibido denuncias formales este año por rifas ilegales, la problemática ha sido reconocida públicamente por autoridades estatales.
La Fiscalía de Jalisco mantiene abierta la investigación para esclarecer el móvil del ataque y determinar responsabilidades. El caso ha puesto nuevamente bajo escrutinio las actividades ilícitas que operan en torno al Mercado de Abastos y la violencia que puede derivarse de ellas.


