

Alejandro Aguilar
EL BUEN TONO
Córdoba, Ver.- Al menos 193 niñas y adolescentes embarazadas fueron atendidas en unidades médicas del IMSS en la región de Córdoba entre 2024 y abril de 2025. Detrás de estas cifras, 172 casos el año pasado y 21 en los primeros meses de 2025, se esconde un patrón de omisión institucional que perpetúa la impunidad, especialmente en casos que configuran delitos de violación.
Pese a la atención médica documentada, que incluye estudios para VIH, hepatitis, sífilis, control prenatal e incluso intervenciones de urgencia, existe un vacío alarmante: Ninguna de estas instancias de salud reporta sistemáticamente los casos a la Fiscalía o al Sistema DIF, como obliga la ley cuando las víctimas son menores de 15 años.
Los Sistemas Municipales de Protección Integral de Niñas, Niños y Adolescentes (SIPINNA), lejos de implementar estrategias integrales para prevenir y atender las causas profundas de esta crisis, se limitan a acciones paliativas y descoordinadas. Programas como los apoyos alimentarios son apenas un parche que ignora los contextos de violencia sexual, abuso intrafamiliar o coerción que suelen originar estos embarazos.
