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Internacional.- Una fiesta de fin de año en la empresa Metal Polo Aramados e Montagem, ubicada en Minas Gerais, Brasil. El empresario Kerly Fabricio, de 37 años, fue apuñalado por su empleado Eliandro Bastos, de 36 años, después de que este último fuera despedido durante la celebración.Según los informes, la situación se tornó violenta cuando Fabricio le comunicó a Bastos que ya no formaría parte de la empresa, argumentando que su salario era “demasiado caro” para la compañía.
Este anuncio provocó la furia del trabajador, quien rompió una botella de vino que había recibido como regalo del empresario. La discusión escaló rápidamente; Fabricio intentó controlar la situación cerrando la puerta de salida y exigiendo que Bastos limpiara el desorden. En un momento crítico, Eliandro sacó un cuchillo y le propinó tres heridas a su jefe en el abdomen, el cuello y el hombro.
A pesar de ser trasladado a un hospital cercano, Kerly Fabricio falleció poco después debido a la gravedad de sus lesiones. Eliandro Bastos logró huir del lugar, pero posteriormente se entregó a las autoridades tras ser convencido por su madre y su hermano. En su defensa, alegó que actuó en legítima defensa, afirmando que su jefe portaba un arma y pretendía llevarlo a un almacén con intenciones letales.
El caso ha generado gran revuelo en las redes sociales y ha suscitado diversas opiniones sobre la violencia en el lugar de trabajo y las relaciones laborales. La empresa Metal Polo Aramados e Montagem ha suspendido sus actividades por el periodo vacacional y se espera que pronto se pronuncien sobre el futuro de la compañía tras esta lamentable situación.
.Las autoridades locales han iniciado una investigación para esclarecer los detalles del incidente y han señalado que Eliandro Bastos enfrentará cargos por homicidio calificado.
