


Danilo Fuentes
El Buen Tono
Fortín.- La red de corrupción encabezada por el presidente municipal Gerardo Rosales Victoria cuenta con la colaboración activa de los integrantes del cabildo, quienes, al permanecer indiferentes ante el saqueo y el mal manejo de los recursos públicos, se convierten en cómplices de la crisis que atraviesa la localidad. Entre ellos destaca Juan Carlos Santiago, regidor cuarto del Partido Acción Nacional (PAN), quien, además de recibir un salario mensual superior a los 25 mil pesos, según la nómina oficial del Ayuntamiento, preside comisiones clave como Planeación de Desarrollo Municipal, Registro Civil, Panteón y Reclutamiento, Participación Ciudadana, Limpia Pública, Turismo y Protección Civil.
A pesar de la gravedad de la situación, marcada por la falta de transparencia en obras públicas, el desabasto de agua y el incremento de la inseguridad, los ediles parecen más interesados en conservar privilegios que en cumplir con sus obligaciones. Prueba de ello es que Juan Carlos Santiago presumió en redes sociales un ostentoso viaje a Las Vegas, con entrada al exclusivo concierto de los Backstreet Boys, mientras la población sufre abandono.
Además, estos servidores públicos perciben elevados sueldos sin rendir cuentas ni ejercer una verdadera labor fiscalizadora, limitándose a aprobar decisiones del alcalde y proteger sus intereses. En consecuencia, los habitantes observan con frustración cómo sus representantes permiten el desvío de fondos públicos y la carencia de atención a problemáticas esenciales. Así, Fortín continúa sumido en un escenario de corrupción e impunidad, donde los regidores, lejos de defender a sus gobernados, optan por el confort personal y la complicidad con un gobierno que los mantiene como aliados.


