Agencias
Oaxaca, 30 de diciembre de 2025 — La tarde de este lunes comenzó la entrega de los cuerpos de las 13 víctimas mortales del descarrilamiento del Tren Interoceánico ocurrido el domingo en el Istmo de Tehuantepec. La presidenta de la República, Claudia Sheinbaum Pardo, acudió a la funeraria y crematorio Ernult, en el municipio de El Espinal, donde se concentran los restos de las personas fallecidas.
Desde temprana hora, familiares ingresaron al crematorio para realizar los trámites legales y recibir los cuerpos de sus seres queridos. La entrega se ha realizado de manera paulatina, conforme se concluyen los procesos forenses y legales. La zona permanece fuertemente resguardada por elementos de la SEDENA, Guardia Nacional, Policía Estatal y Municipal, así como personal de la Fiscalía General de la República, Fiscalía del Estado y la Secretaría de Gobernación, ante la llegada constante de familiares y medios de comunicación.
Durante su visita, Sheinbaum se reunió en privado con los familiares, evitando declaraciones públicas. Señaló que mañana se dará un informe detallado sobre la visita y el acompañamiento a las familias, que incluye apoyo psicológico y un pago inicial de 30 mil pesos para gastos inmediatos.
Horas antes, la mandataria recorrió hospitales de la región, incluyendo el ISSSTE de Tehuantepec y la clínica del IMSS en Salina Cruz, donde permanecen 44 personas hospitalizadas, algunas con lesiones graves.
Entre los fallecidos se encuentra una joven estudiante del Conalep de Salina Cruz y el reportero Israel Gallegos, lo que ha causado consternación en el gremio periodístico de Oaxaca. Los familiares, provenientes de Oaxaca, Veracruz y Tabasco, han evitado dar declaraciones debido al duelo y han acudido principalmente a realizar trámites y trasladar los cuerpos a sus comunidades de origen.
El accidente ocurrió en las cercanías de Nizanda, en una zona de curvas del Tren del Corredor Interoceánico del Istmo de Tehuantepec, proyecto presentado como una apuesta clave para el desarrollo regional. La Secretaría de Marina reportó que viajaban alrededor de 250 personas, de las cuales 13 perdieron la vida y 98 resultaron lesionadas.
Las investigaciones continúan abiertas para determinar las causas del descarrilamiento y las responsabilidades correspondientes, mientras la región enfrenta horas de duelo por esta tragedia ferroviaria, una de las más graves en la historia reciente del Istmo de Tehuantepec.
