De la redacción
El Buen Tono
La inauguración de la exposición “La mitad del mundo. La mujer en el México indígena, el ámbito humano” abrió este martes un espacio de reflexión en Madrid, donde el ministro de Cultura de España, Ernest Urtasun, subrayó la importancia de recuperar palabras que, dijo, “unen y aproximan”, como diálogo, perdón, encuentro o fraternidad.
Durante el acto celebrado en el Museo Arqueológico Nacional (MAN), y acompañado por el embajador de México en España, Quirino Ordaz, Urtasun destacó la necesidad de avanzar hacia la descolonización de los discursos y los relatos históricos para mirar con respeto a realidades que por años fueron silenciadas o ignoradas.
El ministro afirmó que esta exposición es más que un despliegue de piezas: representa un acto de reconocimiento a culturas relegadas y una oportunidad para asumir responsabilidades en desigualdades históricas. Además, señaló que la cultura es un espacio fértil donde se anticipan transformaciones sociales profundas.
La muestra reúne 453 piezas de alto valor artístico; 230 provienen de 31 museos mexicanos y muchas salen por primera vez del país. Podrá visitarse del 3 de noviembre al 22 de marzo en el MAN, con la colaboración de la Casa de México, el Museo Nacional Thyssen-Bornemisza y el Instituto Cervantes.
El proyecto también ha servido como puente diplomático. El ministro español de Exteriores, José Manuel Albares, reconoció días antes “el dolor y la injusticia” provocados históricamente a los pueblos originarios. Según el Gobierno español, la coordinación binacional durante un año permitió un acercamiento político necesario entre ambas naciones.
En el evento, especialistas mexicanas y españolas resaltaron que la exposición busca visibilizar el papel de las mujeres indígenas desde la época prehispánica hasta la actualidad, destacando su relevancia en la vida comunitaria, los sistemas de poder, la esfera sagrada, los ciclos vitales, el linaje y prácticas como el tejido y la alfarería.
La sección presentada por el MAN se centra en el ámbito humano y el protagonismo femenino en los ritos de paso, la vida cotidiana y el universo simbólico, ofreciendo una mirada profunda a la diversidad y grandeza de las culturas originarias de México.

