

Washington D.C. — En un nuevo giro crítico del conflicto entre Irán e Israel, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, confirmó este sábado un ataque directo contra instalaciones nucleares iraníes, en una operación que ha puesto en alerta máxima a la comunidad internacional.
A través de la red social Truth Social, Trump detalló que las instalaciones de Fordow, Natanz e Isfahan fueron blanco de los bombardeos.
“Una carga completa de bombas fue lanzada en el sitio principal, Fordow. Todos los aviones están a salvo en su camino a casa. Felicitaciones a nuestros grandes Guerreros Americanos”, escribió el mandatario.
A pesar de la contundencia de la operación, Trump aseguró que “ahora es el momento de la paz”, generando una mezcla de incertidumbre y expectativa sobre los próximos pasos de la Casa Blanca.
Comienza evacuación de ciudadanos estadounidenses desde Israel
En paralelo al ataque, el Departamento de Estado de EE.UU. anunció el inicio de vuelos de evacuación desde Tel Aviv, trasladando a unos 70 ciudadanos estadounidenses a Atenas, Grecia, como parte de un programa de asistencia ante la creciente tensión militar en la región.
“El 21 de junio, el Departamento de Estado organizó dos vuelos que partieron de Tel Aviv a Atenas con aproximadamente 70 ciudadanos estadounidenses, sus familiares inmediatos acompañantes y residentes legales permanentes”, se informó en un comunicado oficial.
El embajador estadounidense en Israel, Mike Huckabee, confirmó en la red social X que la embajada trabaja “incansablemente” para apoyar a sus compatriotas. Además, se exhortó a los ciudadanos estadounidenses a abandonar Irán de inmediato, o prepararse para buscar refugio prolongado ante la falta de relaciones diplomáticas entre ambos países.
EE.UU. se alinea con Israel en su ofensiva
El ataque ordenado por Trump llega en un momento en que la administración estadounidense considera sumarse plenamente a los ataques israelíes contra Irán, con el propósito declarado de frenar el avance del programa nuclear persa.
La tensión en la región ha escalado drásticamente desde los recientes intercambios de ataques entre Irán e Israel, y con esta intervención directa, Estados Unidos se posiciona como actor clave en un posible conflicto a gran escala.
El mundo observa con atención lo que podría ser un punto de inflexión en el equilibrio geopolítico de Medio Oriente.
