Agencias
México.- A 15 días de anunciada la instalación de las Farmacias del Bienestar, la promesa oficial parece quedarse únicamente en el discurso. Un recorrido de Latinus por distintas Unidades de Medicina Familiar y centros de salud del IMSS-Bienestar en Ecatepec, Estado de México, confirmó que, salvo la unidad Santa Clara —donde se mantiene el prototipo usado durante la transmisión oficial del programa—, los módulos prometidos no se han instalado.
Esta situación ocurre en un contexto crítico para los derechohabientes, quienes enfrentan desabasto de medicamentos esenciales desde hace meses. Usuarios como María Mercedes Sánchez, Carmen García y Mary denunciaron que, tras acudir a consulta médica y recibir su receta, se ven obligados a comprar los medicamentos por fuera, lo que obliga a muchas familias a elegir entre cubrir tratamientos o destinar su presupuesto a alimentación.
La falta de módulos también genera incertidumbre sobre la eficacia del programa y la capacidad del gobierno para garantizar abasto y acceso equitativo a medicinas. Mientras la difusión oficial sostiene que los suministros están asegurados, la realidad en las farmacias internas de los centros de salud evidencia lo contrario, mostrando una brecha entre la promesa gubernamental y la experiencia cotidiana de los pacientes.
Especialistas en salud pública advierten que este retraso puede agravar la desatención médica, especialmente para personas con enfermedades crónicas que dependen de medicación continua, y recalcan la necesidad de que las autoridades cumplan con la instalación de los módulos y supervisen la distribución efectiva de los medicamentos.
Hasta el momento, no se ha emitido un nuevo comunicado oficial sobre el estado de las Farmacias del Bienestar en Ecatepec, mientras los derechohabientes continúan enfrentando largas filas, viajes adicionales y gastos inesperados para poder acceder a sus tratamientos. La incertidumbre persiste y la población exige resultados concretos que garanticen el derecho a la salud.


