Laura A. García
el buen tono
Amatlán- Un revés legal impidió que la administración municipal que encabeza Luis Arturo Figueroa Vargas, extrajera agua del río Atoyac, luego de que un juez federal determinara que violó el derecho a la información al ignorar solicitudes ciudadanas sobre proyectos de explotación del afluente.
El conflicto inició cuando colectivos ambientalistas, preocupados por los daños ecológicos al cuerpo de agua, solicitaron información formal al ayuntamiento sobre permisos y planes para aprovechar el recurso natural.
Nunca recibieron respuesta de las autoridades y menos de Figueroa Vargas, lo que derivó en un amparo ante la justicia federal.
“Exigimos transparencia, pero se negaron. Ocultaron información porque saben que la comunidad se opondría a sus intenciones de sobreexplotar el río”, denunció un integrante del colectivo.
Un juez federal resolvió a favor de los ambientalistas, determinó que, al no responder la solicitud de información, el gobierno municipal perdió el derecho para extraer agua del Atoyac, en este proyecto, y en cualquier otro futuro.
Dicha sentencia sienta un precedente, ninguna autoridad puede actuar a espaldas de los ciudadanos. Si falta transparencia, tampoco hay permiso.
La resolución judicial deja en evidencia la opacidad de la administración de Figueroa Vargas, a quien ahora le impidieron tocar el río sin antes rendir cuentas a los residentes y ambientalistas.
Advirtieron que vigilarán cualquier nuevo intento de explotación del afluente porque hay una orden legal de no tocarlo..
“Vamos a frenar cualquier intento de privatización o destrucción de nuestro río. La victoria es de todos los que dependemos de sus aguas”, afirmaron ciudadanos de Paraje Nuevo, Ojo de Agua Grande, Ojo de Agua Chico, entre otros.
