


Una tarde gris terminó en desastre para decenas de familias en Maravatío y Senguio, Michoacán, luego de una granizada sorpresiva que transformó calles en ríos, provocó inundaciones y hasta colapsó el techo de un salón de fiestas durante una boda.
La boda que terminó en caos
En el Salón de Fiestas “Diamante”, ubicado sobre el Bulevar Leona Vicario en Maravatío, los festejos nupciales fueron interrumpidos bruscamente cuando el techo se vino abajo debido al peso del agua acumulada.
Aunque no hubo heridos, la escena fue devastadora: mesas destrozadas, decoración arruinada y escombros entre los invitados. La celebración tuvo que ser suspendida de inmediato.
Calles convertidas en ríos
La lluvia cayó con tal intensidad que las principales avenidas quedaron anegadas, atrapando a vehículos y peatones. En Senguio, el agua mezclada con lodo y piedras penetró viviendas ubicadas en zonas bajas, provocando pérdidas materiales.
Emergencia activa y saldo blanco
Brigadas de Protección Civil, Guardia Civil y autoridades municipales trabajan en la limpieza y desazolve de canales y calles. A pesar de la magnitud del evento, no se reportan víctimas.
Sin embargo, la preocupación crece entre agricultores por los daños en caminos rurales y cultivos.
Llamado a la precaución
La delegación regional en Zitácuaro permanece en alerta por nuevas lluvias. Se pide a la ciudadanía evitar zonas inundadas y mantenerse informada a través de los canales oficiales.


