De la Redacción
EL BUEN TONO
Córdoba.- Un exhaustivo análisis documental sobre el proceso judicial contra el regidor Eduardo E. Mondragón del Ayuntamiento de Córdoba revela un patrón de irregularidades que compromete la integridad de la investigación y apunta a responsabilidades institucionales.
La revisión de expedientes oficiales y testimonios evidencia fallas estructurales que involucran directamente a la actual síndica municipal, Vania López González, en su manejo del controvertido caso.
La investigación periodística identifica inconsistencias fundamentales en la sustanciación del proceso. Destacan graves omisiones en la investigación original: Fechas imprecisas de los presuntos delitos sin corroboración pericial, testimonios clave que no fueron sometidos a contrainterrogatorio, y la desestimación sistemática de pruebas de descargo. Particularmente cuestionable resulta la validación de testimonios con contradicciones cronológicas mientras se ignoraron elementos objetivos que situaban al acusado en ubicaciones diferentes durante los hechos denunciados.
El papel de la entonces síndica Vania López González emerge como eje central de las críticas. Documentos oficiales indicarían que, desde su posición de supervisión interna, habría impulsado un proceso investigativo con aparentes sesgos de confirmación. Se observa que bajo su gestión se consolidó un caso sustentado en testimonios no contrastados y se omitió verificar coartadas documentadas. Más preocupante aún resulta la aparente coordinación con actores políticos externos para presionar resoluciones judiciales, según revelaría correspondencia entre funcionarios.
