de la redacciónel buen tono
Región.- Automovilistas y transportistas están hartos de las obras que realiza Capufe sobre la autopista Córdoba-Orizaba, que además de trastornar el flujo vehicular, están causando retardos en las entregas de mercancía y posibles pérdidas de productos perecederos, lo que se traduce en un millonario impacto negativo.
Y es que han tenido que enfrentar tráficos de hasta tres horas por las largas filas, lo que ha ocasionado que muchos prefieran huir de la autopista, sólo para encontrarse con que las vías alternas también están saturadas.
A casi dos meses de iniciadas las obras en el puente de Metlac, tan sólo en el tramo Córdoba-Veracruz el aforo descendió en más de 117 mil vehículos de octubre a septiembre.
Aunado a lo anterior, los automovilistas se quejaron porque no ven un avance significativo en la obra, y temen que, como siempre ocurre, Capufe no termine en el lapso estipulado.
Más caos
Como si lo anterior no fuera suficiente, Capufe, sin aviso previo, inició trabajos en la Puebla-Acatzingo, sobre el kilómetro 136.
Indicó que se realizaría la renivelación en la carpeta asfáltica y se haría limpieza en el carril central del kilómetro 136, con dirección a Acatzingo, y que sólo tardarían dos días (ayer y hoy).
