Ada Rosas
EL BUEN TONO
Córdoba, Ver.- Hoy, 22 de agosto, se celebra el Día del Bombero en México, y es un buen momento para recordar a quienes, sin importar el riesgo, se lanzan a apagar llamas y salvar vidas. Entre ellos, hay historias que inspiran y emocionan, como la del padre Óscar Fabricio Martínez Limón, conocido como “el padre bombero” en Córdoba, Veracruz. Su doble vocación de servir a Dios y al prójimo lo ha llevado a vivir experiencias que van más allá de lo cotidiano.
Desde su primer contacto con la corporación, en enero, Óscar Fabricio supo que su camino sería distinto. Inició como bombero honorario y, poco a poco, se integró oficialmente al Heroico Cuerpo de Bomberos, combinando su labor pastoral con la atención a emergencias. Su primer incendio, un accidente trágico en la autopista, lo mostró bendiciendo el lugar mientras los demás atendían la emergencia, marcando la pauta de su entrega total.
A lo largo de 12 años, ha participado en innumerables rescates y situaciones de riesgo. Recuerda caídas, accidentes y momentos en los que acompañó a familias en sus peores días. Cada experiencia lo ha enseñado a equilibrar sus dos mundos: El de la fe y el del fuego. En cada turno, su oración es simple pero profunda: que no pase nada, y si pasa, que sea leve y rápido.
Más allá de las historias de peligro, Óscar Fabricio refleja el espíritu de servicio que caracteriza a todos los bomberos. Sus compañeros, bajo su liderazgo, aprenden que la disciplina, la empatía y el respeto son tan importantes como apagar incendios. Y aunque la vocación de sacerdote sigue guiando sus pasos, también demuestra que la fe se manifiesta fuera de los templos, en la calle, en la ayuda directa a quienes lo necesitan.
Hoy, en el Día del Bombero, es justo recordar a héroes anónimos como él y a todos los bomberos que, cada día, se enfrentan al fuego, la lluvia y los riesgos para protegernos. Como dice su lema personal: “Entre menos emergencias, mejor. Para nosotros es servicio, pero para la gente es desgracia”. Este 22 de agosto, celebremos su valentía y entrega para ellos, que merecen reconocimiento y respeto.
