


De la Redacción
EL BUEN TONO
Córdoba, Ver.- Lo que debía ser una fiesta deportiva terminó en decepción y enojo. La final de la Liga Córdobesa de Béisbol, disputada este domingo entre Cacahuatal y Titanes de Cuatlapan, se vio opacada por la ausencia total de la directiva, encabezada por Salomé Barojas, quien no se presentó a entregar los trofeos ni las medallas correspondientes al equipo campeón.
La molestia fue generalizada, no solo entre delegados y mánagers, sino también entre los jugadores y un gran número de aficionados que acudieron a presenciar el encuentro, especialmente los que hicieron el viaje desde Ixtaczoquitlán para apoyar a su equipo. “Es una falta de respeto, viajamos con la ilusión de ver a nuestro equipo coronarse, y ni un trofeo hubo. Es una burla”, reclamó uno de los asistentes.
Delegados de diferentes equipos exigieron la renuncia inmediata de Barojas, señalando que su falta de compromiso se ha hecho evidente torneo tras torneo. “Él, más que nadie, sabe lo que significa recibir un trofeo, haber sido profesional no lo exime de cumplir con lo mínimo. No se presenta, no entrega premios, pero sí cobra fichas e inscripciones”, reprochó uno de los inconformes.
La situación se agrava con el deplorable estado del estadio que irónicamente lleva su nombre. Vestidores sucios, sin mantenimiento, sin agua, y un campo en malas condiciones reflejan el abandono total en que se encuentra la Liga. “Ya ni siquiera hay respeto por el jugador. Nos arriesgamos a lesiones por un terreno lleno de hoyos y sin atención”, agregó otro delegado.

