

Atoyac, Ver.- Una empresa local fue sorprendida nuevamente vertiendo desechos industriales al río Matalarga, aprovechando el aumento del caudal por las lluvias recientes para ocultar las descargas, lo que ha provocado la indignación de vecinos y activistas ambientales.
Habitantes de Atoyac denuncian que la compañía actúa con total impunidad y evade la vigilancia de las autoridades ambientales, pese a las protestas realizadas hace apenas unas semanas para exigir el cese de esta contaminación. Aseguran que estas prácticas atentan contra la salud pública y dañan gravemente los ecosistemas del afluente.
Colectivos ecologistas calificaron la situación como un “ecocidio deliberado”, al considerar que las descargas contaminantes se han vuelto sistemáticas y que las autoridades han sido omisas frente a la exigencia ciudadana de frenar la contaminación del río.
