DE LA REDACCIÓN
EL BUEN TONO
IXHUATLÁN.- Una comunidad de este municipio recibió ayer la trágica noticia de que uno de sus hijos, un joven perteneciente a las Fuerzas Armadas, había perdido la vida en un enfrentamiento contra delincuentes, cerca de Zacatecas.
La inseguridad en México es un problema alarmante que cala en lo más profundo de las familias. Cada día se escuchan noticias sobre robos, secuestros y asesinatos que generan miedo e incertidumbre.
Esta realidad ha llevado a muchos jóvenes a unirse a las fuerzas armadas, creyendo que así podrán contribuir a combatir este problema y garantizar la seguridad de sus seres queridos y de su país. Sin embargo, esta decisión a menudo tiene consecuencias trágicas, pues como toda actividad de riesgo, muchos mueren en cumplimiento de su deber.
En un país donde las opciones no abundan y las soluciones menos, son muchos los que ven en las fuerzas armadas la esperanza de protección, paz, seguridad estabilidad, el fin del miedo y el corazón del joven lo lleva a la acción y por ello están dispuestos a arriesgar sus vidas.
Pero fuera de la familia y amigos, de nuestros amables vecinos, está ese bosque oscuro, esa selva despiadada que es el México Bárbaro que nos topa y aterra, ahí es donde quien cruza sus fronteras se topan con delincuentes y bandas criminales que están armados y dispuestos a todo para mantener su poder.
