AGENCIA
Virginia.- Jennifer Salinas, reconocida exboxeadora profesional conocida como “The Bolivian Queen”, fue internada recientemente en un hospital psiquiátrico en Virginia, Estados Unidos, luego de que su familia tomara la decisión de ingresarla sin su consentimiento, debido a comportamientos preocupantes exhibidos en público.
La deportista de 42 años se volvió tendencia en redes sociales después de que circularan videos donde se le ve agrediendo a personas en la calle. Estos episodios alertaron tanto a sus seguidores como a su familia, quienes finalmente optaron por su internamiento para recibir atención médica especializada.
La madre de la boxeadora, Sandra Polanco, confirmó el ingreso de su hija y explicó que la decisión se tomó a raíz de los trastornos mentales que ha venido presentando, probablemente derivados de los múltiples traumatismos sufridos durante su carrera en el boxeo profesional.
“Jennifer recibió muchos golpes en la cabeza durante años de combate, lo que lamentablemente ha generado secuelas neurológicas y emocionales”, declaró Polanco, quien también mencionó antecedentes genéticos que podrían haber agravado el cuadro clínico, como depresión maníaca, bipolaridad y otros trastornos psiquiátricos.
Jennifer Salinas nació el 30 de junio de 1982. Aunque de origen boliviano, ha vivido toda su vida en Estados Unidos. Compitió en la categoría de “Súper Gallo” y realizó 24 peleas profesionales, ganando 20 (cinco por nocaut) y perdiendo cuatro. Inició su carrera a los 19 años mientras trabajaba como mesera en un restaurante mexicano en Grand Rapids, Míchigan, y debutó profesionalmente el 16 de mayo de 2003.
Entre sus logros más destacados figura el título del Consejo Mundial de Boxeo (CMB) en la categoría Súper Gallo, que obtuvo tras vencer a Jackie Nava en 2010. También fue campeona mundial de la Federación Mundial de Boxeo (WBF) y de la Federación Universal de Boxeo (UBF) en Súper Pluma, aunque perdió el título de la FIB ante Maiva Hamadouche.
Su última pelea fue en junio de 2017, cuando derrotó a Marquita Lee por decisión unánime, marcando así el final de su carrera en los encordados. Años después, Salinas vuelve a ser noticia, no por sus logros deportivos, sino por su delicado estado de salud mental.
La familia ha pedido respeto y comprensión ante esta situación, confiando en que el tratamiento especializado pueda estabilizar y ayudar a Jennifer a recuperar su bienestar.
