La polémica en torno al alcalde de Ahome, Sinaloa, Gerardo Vargas Landeros, ha escalado a un nuevo nivel luego de que el juez que liberó la orden de aprehensión en su contra fuera denunciado ante instancias federales por desacato.
Se trata del juez Carlos Alberto Herrera, del Juzgado de Primera Instancia de Control y de Enjuiciamiento Penal de la Región Centro en Culiacán, quien el pasado 28 de mayo giró una orden de aprehensión contra el alcalde. Sin embargo, dicha acción fue ejecutada pese a la existencia de una suspensión provisional vigente emitida por el juez federal Juan Enrique Parada Seer, lo cual podría constituir una violación directa a un mandato judicial federal.
La decisión del juez Herrera de mantener la orden de captura, ignorando la suspensión otorgada, motivó una denuncia en su contra bajo el incidente de suspensión número 325/202-3B.
Además, las responsabilidades legales no recaen únicamente sobre el juez. El operativo de captura fue encabezado por el Comandante “Omega” de la Fiscalía General del Estado (FGE) de Sinaloa, quien también ha sido denunciado y se encuentra bajo la lupa de las autoridades federales.
Este nuevo capítulo en el caso de Vargas Landeros no solo complica la situación jurídica del alcalde, sino que abre una grieta en el sistema de justicia sinaloense, al evidenciar posibles abusos de poder y desacato a mandatos federales por parte de jueces y cuerpos de seguridad.
Por ahora, se espera que las instancias correspondientes esclarezcan los hechos y determinen si hubo violaciones al debido proceso y a los derechos constitucionales del edil, quien sigue siendo una figura polémica en la política sinaloense.
