La Reserva Federal de Estados Unidos realizó este miércoles el primer recorte de tasas de interés en nueve meses, en un intento por estimular un mercado laboral debilitado, marcando también el primer ajuste a la baja durante el segundo mandato del presidente Donald Trump.
El banco central redujo su tasa de interés de referencia en 0.25 puntos porcentuales, colocándola en un nuevo rango de 4.00 % a 4.25 %, lo que representa un giro en su política monetaria tras un largo periodo de contención.
Aunque el presidente Trump ha ejercido constante presión pública sobre la Fed para bajar las tasas desde que inició su segundo mandato, los funcionarios del banco central han reiterado que sus decisiones responden exclusivamente a indicadores económicos y no a presiones políticas. En este caso, la falta de dinamismo en la creación de empleo y señales de enfriamiento en el consumo fueron los factores clave detrás de la decisión.
Durante meses, la Fed se mostró cautelosa respecto a mover las tasas, argumentando que necesitaba tiempo para evaluar el impacto de las políticas económicas del Gobierno, incluidos los nuevos aranceles y cambios fiscales impulsados por la Casa Blanca. Sin embargo, el deterioro de los datos del mercado laboral terminó por inclinar la balanza.
“La política monetaria debe responder a las condiciones económicas, no al entorno político”, señaló un funcionario de la Fed bajo condición de anonimato.
El recorte marca un cambio de rumbo después de que la tasa se mantuviera sin cambios desde diciembre de 2024. Aún no está claro si este movimiento es el inicio de un ciclo más amplio de recortes o una medida puntual para mitigar los riesgos a corto plazo.
