in

La verdadera Sánchez Cordero

Superiberia

Olga María del Carmen Sánchez Cordero Dávila, tiene 74 años. Pertenece a la Logia del Valle de México desde hace 4 décadas. Es hija política de María de los Ángeles Moreno, masona y ocultista, que presidió al PRI mientras operaba en la era salinista, representando los intereses del grupo Atlacomulco.

Su suplente (de Olga), actualmente en el Senado, es Jesusa Rodríguez, su comadre y mejor amiga, quien dijo que “no es común encontrar a alguien católico e inteligente”.

Olga Sánchez Cordero fue la primera Notaria en la CDMX, después de haberse consagrado en la Logia masónica, al alcanzar el grado 21 desde entonces, con los ritos y juramentos que ello implica. Siempre ha odiado la maternidad y ha escrito varios artículos donde proclama la muerte del “patriarcado opresor”.

Duró de 1995 al 2015, un total de 20 años, como ministra de la SCJN donde, con su voto, iniciativas y cabildeo, lideró el impulso al feminismo radical, la legalización del aborto, drogas, eutanasia, gaymonio e ideología de género.

Se denomina a sí misma como luciferina, en los círculos masónicos. Es enemiga política de otra masona: Beatriz Pagés. Nunca tuvo hijos (Olga) y al amparo del poder y la corrupción ha amasado una fortuna de, al menos, 400 millones de dólares. Es la activista y promotora más importante del aborto en México.

Coautora del libro “Simone de Beauvoir…entre nosotras” del año 2009, donde públicamente le declara la guerra a la tradición cristiana que rige las leyes en Occidente, el matrimonio y la religión católica.

Se declara Marxista, progresista y liberal y hoy regresa al Senado, a cerciorarse de que México no solo se vuelva nación sociocomunista bajo la dictadura de AMLO sino, además, a reformar todo el ordenamiento legal que transforme a México en el paraíso del lobby gay internacional, el aborto y la persecusión a los valores cristianos, los cuales ella odia y desprecia públicamente en sus conferencias, al lado del falso sacerdote católico Fray Cruzalta y María Lamas.

CANAL OFICIAL

Julio Scherer y una salida muy desaseada

Defraudan gasolineras