


De la Redacción
El Buen Tono
CÓRDOBA.- El paso a desnivel de La Estación, presentado como la obra que representa al gobierno de Leticia López Landero, terminó siendo una obra deficiente, endeudada y símbolo del pacto de impunidad entre dos administraciones igual de corruptas.
A casi cuatro años de su entrega, el ayuntamiento de Córdoba sigue debiendo más de 5 millones de pesos a la empresa constructora Terroca SA de CV, mientras la estructura se cae a pedazos sin mantenimiento ni responsables.
Leticia López intenta lavarse las manos diciendo que dejó “etiquetado” el dinero para la última etapa, pero entregó una obra con múltiples deficiencias: filtraciones, luminarias inservibles, acabados inconclusos y problemas estructurales.
Por su parte, Juan Martínez Flores, lejos de corregir o exigir cuentas, se convirtió en su tapadera. No pagó el adeudo porque, según denuncias, sus funcionarios quisieron extorsionar a la empresa con un moche del 30 %. Al negarse, la constructora fue ignorada.
Ambos gobiernos han lucrado políticamente con una obra pública convertida en fracaso urbano. Leticia se enriqueció durante su gestión y dejó el paso a desnivel como cortina de humo, mientras acumulaba casas, terrenos y negocios. Juan Martínez guardó silencio cómplice, permitiendo el abandono de la estructura y dejando que la deuda crezca con intereses que pagará el próximo gobierno.

