

DAVID GABRIEL G.
el buen tono
Región.- Al menos cuatro accidentes, ocurridos a lo largo de varios tramos de la autopista Puebla-Córdoba, dejó la fuerte tormenta que se registró todo el día de ayer en la región y que arrojaron como saldo daños materiales cuantiosos y afectaciones a la circulación.
Cerca de las 11:30 horas una camioneta marca Ford F-150 color gris, placas de circulación del estado, que se desplazaba por el carril que va con dirección a Puebla, derrapó sobre el piso mojado y se salió de la carretera.
Luego de chocar contra el cerro, la unidad acabó varada sobre la cuneta que está sobre el acotamiento lateral, sus ocupantes resultaron con heridas leves que fueron valoradas por paramédicos de Caminos y Puentes Federales.
CARAMBOLA
Minutos después, pero a la altura del kilómetro 233, de la comunidad de Magueyes, un tráiler que iba acoplado a una plataforma se fue a estrellar contra una camioneta marca Ford F-150 color gris, cuyo chofer viajaba rumbo al vecino estado.
En el percance participaron otros dos vehículos, aunque por fortuna no hubo muertos ni lesionados, el personal de Capufe que se movilizó al lugar de este múltiple accidente, realizó el abanderamiento correspondiente.
EN EL TRÉBOL
Otro accidente más se dio a la altura del Trébol de Maltrata, en donde el operador de un tráiler perdió el control del volante y se salió de la superficie de rodamiento, hasta que acabó varado dentro de unos matorrales; el chofer salió ileso.
VUELCA CAMIONETA
Finalmente, una camioneta Ford Lobo color negro en la que viajaban varios trabajadores de la construcción, chocó contra el cerro y acabó volcada sobre su costado derecho, dos de sus ocupantes resultaron lesionados aunque no de gravedad.
Según los primeros peritajes el percance se debió a que la unidad era conducida a exceso de velocidad y sin las debidas precauciones, por lo que al entrar a la curva de El Infiernillo, acabó siniestrada sobre el carril de baja velocidad y a merced de otras unidades.
En todos los casos fue el personal médico de Capufe de las direcciones de Esperanza y Ciudad Mendoza, los encargados de brindar atención pre hospitalaria a los afectados, aunque por fortuna no hubo más víctimas que lamentar, sólo daños materiales.
