En conmemoración del 107 aniversario de la Constitución mexicana, el presidente Andrés Manuel López Obrador presentó un paquete de 20 iniciativas de reforma constitucional con el objetivo de consolidar y proteger la llamada Cuarta Transformación, asegurando que sea difícil revertirla en el futuro.
Las propuestas del presidente abarcan diversos ámbitos, desde reformas en el Poder Judicial hasta cambios en el sistema político y económico. Entre las medidas destacadas se incluye un aumento al salario mínimo por encima de la inflación, la reversión de reformas previas para garantizar jubilaciones al cien por ciento, y la creación de un fideicomiso de 64 mil millones de pesos.
En el ámbito político, López Obrador propuso reducir el número de diputados federales a 300 y de senadores a 64, así como disminuir el gasto de los partidos políticos y de las campañas electorales. También planteó la eliminación de diputaciones y senadurías plurinominales, y la elección por voto de los consejeros y magistrados electorales.
En relación al Poder Judicial, reiteró su intención de que los ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación sean elegidos por voto popular, con candidatos propuestos por el presidente, el Congreso y el Poder Judicial. También insistió en que la Guardia Nacional quede bajo la jurisdicción de la Secretaría de la Defensa Nacional, a pesar de un rechazo previo por parte del máximo tribunal del país.
López Obrador argumentó que estas propuestas buscan erradicar las reformas del periodo neoliberal, considerándolas contrarias al interés público y distorsiones que contradicen el espíritu original de la Carta Magna. El presidente hizo el anuncio en el antiguo recinto del Congreso, en el Palacio Nacional, acompañado solo por su gabinete legal y ampliado.
