De la redacción
El Buen Tono
La icónica vedette mexicana Lyn May reveló recientemente los momentos incómodos que vivió al inicio de su carrera en televisión, cuando era menor de edad. En una entrevista para el programa Sale el Sol, la actriz relató las presiones y exigencias machistas que recibió por parte de Raúl Velasco para participar en su famoso programa Siempre en Domingo.
“Era muy exigente, era muy enojón, siempre me decía que le subiera a la falda que estaba muy larga. Le molestaba, él quería que enseñara uno más calzones”, confesó Lyn May, quien tenía aproximadamente 17 años en ese entonces. Según su relato, no podía negarse por temor a ser despedida, una situación que también vivían otras jóvenes bailarinas del programa.
Lyn May, originaria de Nuxco, Guerrero, comenzó trabajando desde muy joven para apoyar a su familia y más tarde inició su carrera como bailarina en cabarets de Acapulco. Su talento la llevó a la Ciudad de México, donde se unió al ballet de Siempre en Domingo y destacó con danzas tribales, hawaianas y tahitianas, consolidándose como “Lyn May, la Diosa del Amor”.
A lo largo de su carrera, la actriz incursionó en el cine mexicano y enfrentó altibajos personales, incluyendo pérdidas y cirugías estéticas que afectaron su vida pública. Sus declaraciones sobre las exigencias de Velasco visibilizan las dinámicas de poder que enfrentaban las mujeres en la industria del entretenimiento y subrayan su resiliencia y autenticidad a lo largo de más de cinco décadas de trayectoria.
A sus 73 años, Lyn May sigue siendo un ícono de la cultura popular mexicana, admirada por su talento y valentía al contar su historia.


