AGENCIA
Jalisco.- “Tercera y última llamada. Vete de Jalisco”. Esa fue la advertencia que escuchó Beatriz Uscanga mientras un grupo de hombres la golpeaba, dejándola tirada en el piso horas después de haber salido de misa. Su hijo, Sebastián Menéndez, de 18 años, desapareció el 4 de septiembre tras recibir una supuesta oferta laboral en Guadalajara. Desde entonces, su rastro se perdió tras tomar un Uber rumbo a Zapopan, donde tendría lugar la presunta entrevista.
Beatriz viajó desde Querétaro para buscarlo en un estado marcado por miles de desapariciones. Ha denunciado públicamente la inacción de la Fiscalía estatal y ha criticado al gobierno de Jalisco por, afirma, preocuparse más por la imagen que proyectará rumbo al Mundial 2026 que por la crisis humanitaria que enfrenta. El 16 de noviembre fue atacada y amenazada.
Recibió golpes y amenazas directas: que era la última advertencia y que debía abandonar Jalisco. Tras la agresión, y por recomendación de autoridades ministeriales, denunció los hechos y salió del estado para “dejar que las cosas se enfríen”.
El contexto es alarmante: en los últimos 15 años, al menos 28 personas buscadoras han sido asesinadas o desaparecidas, según la organización Artículo 19. La lista reciente es extensa. El 23 de noviembre desaparecieron en Mazatlán Herminia Guadalupe -hija de una madre buscadora- y su amiga Teresa de Jesús. El 14 de octubre fue desaparecida María de los Ángeles Valenzuela, también buscadora. En junio, hombres armados levantaron en Irapuato a José Francisco Arias Mendoza, integrante del colectivo Hasta Encontrarte.
Mientras tanto, no hay avances en el caso de Sebastián. Beatriz asegura que la actuación de las autoridades es lenta y deficiente: afirma que las Fiscalías le exigen entregar nueva información para mover el expediente, y que la poca investigación realizada ha sido por su insistencia.
Las cifras oficiales confirman la magnitud del problema. Hasta el 9 de diciembre, Jalisco sumaba 481 denuncias de desaparición de niñas, niños, adolescentes y jóvenes de hasta 29 años. De ellos, 231 siguen sin ser localizados y nueve fueron encontrados sin vida. Activistas denuncian que las cifras reales son mucho mayores y acusan que desde 2022 se alteraron los criterios de registro para reducir artificialmente los números.
La crisis quedó expuesta con el hallazgo de 456 bolsas con restos humanos en predios cercanos al Estadio Akron, sede del Mundial 2026. Fueron recolectadas entre 2022 y 2025 por colectivos de búsqueda. Dentro había cuerpos completos, segmentos y restos antiguos y recientes. Solo una mínima parte ha sido identificada.
Desde fuera de Jalisco, Beatriz evalúa cómo continuar la búsqueda en medio del miedo, las amenazas y la falta de avances de las autoridades de dos estados.
“Dime cómo es posible que una madre tenga que escarbar con un pico, una pila y hasta con las uñas para encontrar alguna pista de su hijo. No es justo”, lamenta.
