AGENCIA
Nacional.- El envío de petróleo de México a Cuba volvió al centro del debate público luego de que la presidenta Claudia Sheinbaum defendiera esta cooperación energética, al señalar que se trata de una práctica histórica, legal y con un componente humanitario, independientemente del partido político en el poder.
Durante su conferencia matutina de este 22 de diciembre, la mandataria adelantó que Petróleos Mexicanos (Pemex) dará a conocer el número de barriles enviados y el precio de mercado al que se entregan, con el objetivo de transparentar los acuerdos vigentes entre ambos países.
Sheinbaum subrayó que la relación energética entre México y Cuba se ha mantenido por décadas y recordó que la Secretaría de Relaciones Exteriores presentó un informe con los principales acuerdos firmados por distintos gobiernos mexicanos.
Entre ellos destacan la inversión de 350 millones de dólares en 1994 para modernizar la refinería de Cienfuegos mediante un esquema de intercambio de deuda por inversión; las cartas de intención de 2012 para que Pemex brindara asistencia técnica a la petrolera estatal cubana CUPET; y la condonación del 70 por ciento de la deuda histórica de Cuba con Bancomext en 2013, durante el sexenio de Enrique Peña Nieto, con el objetivo de reestructurar el resto y fomentar el comercio bilateral.
La presidenta insistió en que estos apoyos se realizan dentro de un marco legal y forman parte de una política de Estado sostenida a lo largo del tiempo.
Los envíos de crudo ocurren en uno de los momentos más críticos para el sistema eléctrico cubano. Desde mediados de 2024, la isla enfrenta una severa crisis energética derivada de la obsolescencia de sus centrales termoeléctricas y la falta de divisas para adquirir combustible. En el último año, el sistema eléctrico nacional ha sufrido al menos cinco colapsos totales y múltiples apagones parciales, lo que ha impactado sectores clave de la economía y elevado el descontento social.
Cuba requiere alrededor de 110 mil barriles diarios para cubrir sus necesidades energéticas básicas, pero produce únicamente cerca de 40 mil barriles, por lo que depende de importaciones para mantener en operación sus plantas generadoras. De acuerdo con estimaciones citadas en investigaciones de Mexicanos Contra la Corrupción y la Impunidad (MCCI), Pemex envía alrededor de 80 mil barriles de crudo, volumen que cubre buena parte del déficit diario de la isla.
Datos de la Oficina Nacional de Estadística e Información de Cuba indican que el 60 por ciento del combustible consumido en el país es importado y que el 65 por ciento se destina a la generación eléctrica, lo que explica la relevancia estratégica de los envíos mexicanos para el funcionamiento básico del país caribeño.
El impacto económico para México ha sido uno de los aspectos más cuestionados. MCCI estima que los envíos de combustibles subsidiados a Cuba superan los 3 mil millones de dólares, equivalentes a aproximadamente 60 mil millones de pesos. Esta cifra es comparable al presupuesto total de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana proyectado para 2026 y cuadruplica los recursos asignados a la Fiscalía General de la República y al Fondo de Aportaciones Múltiples destinados a infraestructura educativa básica.
El organismo también advirtió que estos envíos han contribuido al deterioro financiero de Pemex, actualmente considerada la petrolera más endeudada del mundo. Desde febrero, señaló que Gasolinas Bienestar, en su primer año de operaciones, reportó pérdidas y una deuda de 5 mil 836 millones de pesos, atribuida en parte al combustible entregado gratuitamente a Cuba.
Y en cambio Cuba manda agentes de inteligencia y francotiradores militares, al igual como le hicieron con Venezuela.
Increíble como permitimos que usen nuestros recursos en en perjuicio de la población y aún así se apoye al régimen; eso sí está muy mal y peor aún la sociedad lo permite y calla.


