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CD. Mendoza.- La milpa es el sistema agrícola tradicional que sobrevivió a lo largo de la historia y para muchas familias mexicanas representa la subsistencia, buena alimentación, salud y, por supuesto, la conservación de la agrobiodiversidad.
La coordinadora del Centro de Investigaciones Tropicales (Citro) de la Universidad Veracruzana (UV), Citlalli López Binnqüist, informó lo anterior y añadió que se trata de un sistema conformado por un policultivo.
Explicó que lo anterior es porque se trata de diferentes siembras en la misma superficie como frijol, calabaza, chiles y otras especies, depende de la región en la que se encuentren. “Por ejemplo, en Veracruz se le agregan quelites y otras variedades”.
Descartó que se puede hablar de un tipo específico de milpa, puesto que cada zona tiene un suelo, clima e incluso especies diferentes, por lo tanto varía de un punto a otro, incluso de una familia a otra, de ahí que representa un patrimonio biocultural al detonar la relación entre el ser humano y el entorno.
Este modo de producción, agregó, no está contabilizado dentro de la Encuesta Nacional Agropecuaria 2019; sin embargo, se tiene una referencia respecto del total de superficie sembrada de maíz amarillo y blanco, ambos representan el 54.1 por ciento de hectáreas sembradas de cultivos anuales y perenes en México; y, el 53.23 por ciento de hectáreas cosechadas.
“Los datos demuestran que el cultivo de maíz sigue siendo fundamental para la economía mexicana al ocupar la mitad de las hectáreas de cultivo, pero no representa a la tradición milenaria de la milpa, ya que no se especifica si las hectáreas sembradas representan un monocultivo o un policultivo”, dijo.
