Agencias
Nicaragua.- El Ministerio Público de Nicaragua ha formulado acusaciones de lavado de dinero contra tres misioneros evangélicos estadounidenses y 13 colaboradores nicaragüenses, todos vinculados a la iglesia Mountain Gateway (Puerta de la Montaña). Jacob Britton Hancock, John Britton Hancock y Cassandra Mae Hancock, representantes de la iglesia clausurada el mes pasado por el gobierno de Nicaragua, se encuentran entre los acusados.
La Fiscalía, tras realizar una “investigación pormenorizada”, acusa a los miembros de Puerta de la Montaña de formar parte de una “estructura delictiva”. Se emitieron órdenes de captura para los acusados prófugos. La iglesia ha negado las acusaciones, alegando que su financiación se gestionó adecuadamente.
Según la policía nicaragüense, los acusados, junto con el estadounidense Bruce Wagner, dueño de una compañía de aviación y de un grupo evangélico, formaban parte de una “red de lavado de dinero”. Puerta de la Montaña y Sacudiendo Naciones, según la policía, operaban en zonas rurales bajo la apariencia de ayudar al pueblo con actividades religiosas, mientras adquirían propiedades y realizaban negocios. Wagner, cuyo paradero es desconocido, habría transferido capitales para realizar transacciones financieras.
La situación se enmarca en una crisis política y social en Nicaragua, con numerosas organizaciones religiosas cerradas en los últimos dos años. La vicepresidenta Rosario Murillo afirmó que en el país hay “paz” y “seguridad”, a pesar de las tensiones políticas y las acusaciones de violaciones a los derechos humanos. El caso destaca la complejidad de las relaciones entre la religión y el poder en la nación centroamericana.
