
De la Redacción
El Buen Tono
Córdoba.- El arranque de campaña de Manuel Alonso Cerezo, candidato impuesto por Morena en Córdoba, fue un retrato perfecto de lo que representa: simulación, derroche y absoluto rechazo ciudadano.
El evento, realizado en el parque 21 de Mayo, fue precedido por una movilización evidente de personas acarreadas desde distintas colonias. Camiones del diputado Juan Tress, camionetas y operadores desplegados para llenar el cuadro principal del centro; sin embargo, el operativo fracasó: antes siquiera de que el candidato iniciara su discurso, gran parte de los asistentes ya se estaba retirando.
Mientras el equipo de campaña intentó mantener a la gente en sus lugares, las imágenes hablaban por sí solas: asistentes aburridos, indiferentes y sin conexión con el candidato. Ni el gasto en logística ni el montaje escénico pudieron ocultar la falta de liderazgo y arraigo.
¿Y el dinero?
El tope autorizado por el OPLE para las campañas municipales en Córdoba es de 1,044,000 pesos, y lo visto este martes abre serias dudas sobre el origen y uso de los recursos que están sosteniendo la campaña de Alonso. Toldos, templetes, audio profesional, transportes y alimentación masiva representan un gasto que podría rebasar los límites permitidos desde el primer día.
El mensaje claro:
no te quieren, Manuel
Alonso Cerezo llegó al 21 de Mayo sin respaldo real, sin entusiasmo popular y sin credibilidad, y eso quedó demostrado en el momento más simbólico, cuando el supuesto “gran arranque” terminó sin aplausos.
