AGENCIA
Nacional.- Después de 31 años, la Junta de Coordinación Política (Jucopo) del Senado acordó iniciar los trámites para la extinción del Fideicomiso número 1705, constituido para la construcción y equipamiento de la nueva sede de la Cámara Alta, que hasta junio de este año contaba con más de mil millones de pesos.
El presidente de la Jucopo, Adán Augusto López Hernández, informó que este miércoles se entregarán 800 millones de pesos a la Tesorería del Senado y que en enero de 2026 se transferirá el remanente de aproximadamente 250 millones. Posteriormente, los recursos serán integrados al gobierno federal, bajo la premisa de utilizarlos en la reconstrucción de regiones afectadas por lluvias e inundaciones.
Sin embargo, críticos señalan que, como ha sucedido con la desaparición de otros fideicomisos, Morena utiliza el pretexto de “cumplimiento del objeto” para concentrar y controlar recursos que originalmente estaban destinados a fines específicos, desviando la intención inicial del dinero público. El fideicomiso, modificado en varias ocasiones desde su creación en 1994, había sido empleado para adquisición de terrenos, construcción del edificio, mobiliario y equipo de cómputo del Senado, cumpliendo con su propósito original.
Analistas advierten que la liquidación del fideicomiso no representa un ahorro real para el erario, sino una maniobra más del partido gobernante para apropiarse de fondos destinados a fines específicos, bajo la narrativa de austeridad y apoyo a emergencias, replicando un patrón ya visto con la desaparición de otros fideicomisos durante la administración federal.
El remanente de más de mil millones de pesos, que ahora pasará a la Tesorería de la Federación, evidencia cómo Morena prioriza concentrar el dinero público en lugar de mantener mecanismos transparentes que aseguren el uso correcto de los recursos y la rendición de cuentas.
