


AGENCIA
Nacional.- Durante el discurso de la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo por su primer año de gobierno en el Zócalo, los morenistas Adán Augusto López Hernández y Andrés Manuel López Beltrán quedaron relegados a la segunda y tercera fila, detrás de las vallas de seguridad, mientras los gobernadores del país ocuparon los primeros lugares frente al templete.
Adán Augusto López Hernández, senador, se sentó junto al senador Manuel Velasco, mientras que Andrés Manuel López Beltrán, secretario de organización de Morena, estuvo una fila más atrás junto a la presidenta del partido, Luisa María Alcalde, grabando con su teléfono a la mandataria mientras pasaba frente a los gobernadores.
El hecho recordó un episodio ocurrido en 2024, cuando los mismos morenistas, junto con Ricardo Monreal y Luisa María Alcalde, desairaron a la presidenta durante su primer Informe de Gobierno en Palacio Nacional, al no percatarse de su llegada mientras se tomaban fotografías. Tras aquel incidente, ofrecieron disculpas y aseguraron que no se dieron cuenta de la presencia de Sheinbaum.
Este nuevo acomodo en el Zócalo refleja la distancia que se mantuvo entre la presidenta y estos miembros de Morena, dejando en evidencia un gesto de protocolo y organización durante el evento oficial.

