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Ciudad de México.- Una vez más, un hecho trágico sacude a la cadena de gimnasios Smart Fit. Este miércoles, una mujer perdió la vida dentro de las instalaciones ubicadas en la unidad Tlatelolco, presuntamente mientras realizaba su rutina de ejercicio.
Lo más alarmante del caso es la reacción del personal del lugar: dos supuestos entrenadores fueron arrestados por elementos de seguridad tras intentar ocultar el cuerpo. De acuerdo con reportes preliminares, al no saber cómo proceder ante la emergencia, los sujetos decidieron bajar el cuerpo desde el tercer piso —donde se encuentra el gimnasio— hasta la planta baja, donde lo abandonaron.
Autoridades capitalinas ya investigan el caso y no se descarta la posibilidad de que los responsables enfrenten cargos por omisión de auxilio y manipulación indebida de un cadáver.
Este lamentable suceso se suma a una serie de incidentes registrados en distintos puntos del país en instalaciones de la misma cadena. La recurrencia de muertes o emergencias médicas graves dentro de sus gimnasios ha encendido las alarmas sobre la falta de preparación del personal y la aparente ausencia de protocolos de emergencia eficaces.
Especialistas en deporte y salud recomiendan a la población verificar que los gimnasios cuenten con personal certificado, atención médica inmediata y condiciones adecuadas de seguridad. “Lo barato sale caro”, señalan usuarios en redes sociales tras conocer el caso.
