Orizaba.- El mundo actual requiere de un Papa joven, con mucha vitalidad, fuerza física y mental para aguantar los compromisos de la Iglesia Católica y conducir la difícil situación que se vive, consideró el obispo, Marcelino Hernández.
Aseguró que todos agradecen el trabajo de Benedicto XVI, porque fue un guía de transición, durante su mandato viajó más de 30 veces por el mundo y escribió varios libros que ayudarán a la Iglesia Católica a fortalecerse e integrarse, “fue productivo e intelectual”.
Precisó que a 10 días de dejar el cargo bajó la carga de trabajo que es muy pesada, explicó que después del día 28 no se nombrará la figura y sólo se pedirá por los obispos, hasta que haya un nuevo jerarca que esperan sea “un representante muy de la comunicación”.
Omar Celiseo V.
El Buen Tono
