Alejandro Aguilar
El Buen Tono
Córdoba.- Recién concluidas las festividades del Día de Muertos, una revisión de las respuestas oficiales a solicitudes de transparencia revela una serie de acciones tardías y omisiones graves en la administración de los panteones municipales de Córdoba.
En una acción tardía que evidencia años de descontrol en la gestión de los panteones municipales, la Jefatura de Cementerios, a cargo de la Lic. Marisol González Salamihua, admitió de manera explícita que, hasta el 11 de agosto de 2025, a escasos tres meses de la celebración del Día de Muertos, comenzó a llevar registros fundamentales que debieron existir desde siempre.
Antes de esa fecha, la oficina operaba sin información básica: no desglosaba los tipos de espacios (nuevos o existentes) en las inhumaciones, ni distinguía entre fosas vacías y tumbas con derechos preexistentes. Tampoco documentaba los casos de pérdida de derechos por falta de pago.
Fue solo a partir de agosto que se inició un registro de fosas con derechos vencidos, identificando de inmediato 136 casos. Había un problema que estaba extendido, pero no se cuantificaba ni se gestionaba.
De manera aún más preocupante, la encargada confirmó que no se realizan actas de verificación que constaten que el cuerpo entro del ataúd corresponde con el acta de defunción. El procedimiento se limita a recibir documentos, sin una comprobación que prevenga fraudes o suplantaciones.
Estas revelaciones pintan una administración que actuó con opacidad e improvisación en la gestión de un servicio público esencial, y que solo emprendió acciones de control y registro cuando el escrutinio externo lo exigió, en este caso vía solicitudes de información vía Plataforma Nacional de Transparencia por este medio de comunicación.


