

De la Redacción
EL BUEN TONO
Orizaba.- En el municipio de Atzacan, el poder no se vota, se hereda, pues Mario Alberto Vargas Amador, alcalde en funciones, ha convertido el municipio en un feudo familiar al impulsar la candidatura de su esposa, Margarita Durán Alcántara, para sucederlo en la alcaldía, ambición que no solo viola principios democráticos, sino que se financia con recursos públicos, denunciaron habitantes.
Margarita Durán, candidata del PT, ha sido señalada de beneficiarse de decisiones municipales diseñadas para favorecer sus intereses, pues tan sólo durante la última feria local, el ayuntamiento restringió la venta de cerveza en la tienda convencional ubicada a un costado del Palacio, a pesar de que cuenta con permiso legal, y con ello favorecer a una carpa que se instaló en la feria con venta de cerveza, negocio vinculado a la familia del Alcalde, para lo cual además personal municipal vigiló el cumplimiento de esta orden arbitraria, evidenciando el uso de instituciones públicas para beneficio privado .
Asimismo, los pobladores denunciaron, que la candidata ha despedido a empleados de Protección Civil que se negaron a sumarse a su campaña, un acto que mezcla coerción laboral con proselitismo político.
