La administración del presidente estadounidense Donald Trump ordenó hoy el cierre de la oficina en Washington de la Organización para la Liberación de Palestina (OLP), como medida de presión para forzar a las autoridades palestinas a reiniciar pláticas de paz con Israel.
El sorpresivo cierre fue anunciado en vísperas de que la Casa Blanca presente su plan de paz para Medio Oriente, liderado por el asesor especial Jared Kushner, yerno del presidente, al cual se oponen en principio los palestinos, al considerar que sólo beneficia a Israel y en repudio al reconocimiento de Jerusalén como capital hebrea.
Heather Nauert, vocera del Departamento de Estado dijo que la decisión se tomó después de una “cuidadosa revisión”, y resaltó que la representación palestina permaneció abierta para facilitar el reinicio de las pláticas entre palestinos e israelíes, sin éxito hasta ahora.
“La OLP no ha tomado pasos para avanzar el inicio de pláticas significativas con Israel. Sus líderes han condenado el plan de paz de Estados Unidos, que no han visto todavía, y se han rehusado a involucrarse con el gobierno de Estados Unidos con respecto a esfuerzos de paz y de otras formas”, acusó.
La Casa Blanca también atendió a las presiones del senador republicano Ted Cruz y la congresista republicana Ileana Ros-Lehtinen, aunque Nauert las aludió como “preocupaciones”
“Esta decisión es también consistente con las preocupaciones de la administración y del Congreso con los esfuerzos palestinos para facilitar una investigación de Israel por la Corte Penal Internacional (CPI)”, añadió Nauert, luego que el gobierno estadunidense amenazara con tomar represalias para impedir cualquier investigación del organismo a sus ciudadanos.
