


Sandra González
El Buen Tono
Orizaba, Ver.- Mientras las autoridades municipales de Orizaba intentan ocultar una falla en la Atalaya de Cristal ubicada en el Cerro del Borrego, la estructura sigue recibiendo visitantes, a pesar de los evidentes riesgos que representa una capa de vidrio estrellada.
Lejos de reconocer públicamente el desperfecto, el ayuntamiento desplegó una campaña en redes sociales que rozó lo absurdo: vídeos con influencers locales realizando retos inspirados en el “Juego del Calamar”, e incluso contenido sospechosamente generado con Inteligencia Artificial. Todo para simular normalidad y mantener en pie la narrativa de un atractivo “seguro”, sin mencionar el más mínimo riesgo.


