Juan Meza
EL BUEN TONO
CÓRDOBA.- Las aduanas de México necesitan transformarse, el camino para consolidar su modernización aún es largo y actualmente sin rumbo, desde el personal que atiende en ventanillas hasta la gerencia o dirección de los aeropuertos, en donde lejos de informar y orientar ponen trabas.
Lejos queda el emblema de transformación dentro del gobierno morenista, y es que usuarios del aeropuerto de la ciudad y puerto de Veracruz, “Heriberto Jara Corona” se han encontrado con una nueva administración, ya que hace unos meses el presidente Andrés Manuel López Obrador cambió al militarizar los puertos y aeropuertos para el control aduanal, provocando que los trámites para poder viajar al extranjero o ingresar a México sean un suculento objetivo para las corruptas mañas y prácticas dilatorias.
La nueva institución denominada Agencia Nacional de Aduanas de México (ANAM) dependerá directamente de la Oficina del titular de Hacienda, contando con autonomía financiera, administrativa y operativa, dejando de lado el objetivo castrense de limpiar estos puntos de acceso y salida nuestro País para agilizar el plan gubernamental de “limpieza”, lejos de resolver problemas crea nuevos y peores con la nueva ANAM.
La ANAM también se coordinará supuestamente con el Ejército y la Marina para preservar la seguridad en los puntos aduanales, y deberá mantener coordinación con el SAT para la correcta recaudación, administración y contabilidad de los ingresos recaudados, buscando con ello mantener sus “programas” sociales y conservar el electorado para el próximo proceso electoral.
Pero agrégale que viajeros que arriban a Veracruz en el único vuelo que llega de Houston se quejan de la larga fila que se forma para osar la aduana. Ya que debido al cambio (Agencia Nacional de Aduanas de México) ahora literal revisan a todo mundo sus maletas
Las abren 3 señoritas que están apostadas a la salida y revisan pantalón por pantalón blusa por blusa, es más tardado osar la aduana que el mismo vuelo desde Texas.
