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Ciudad de México.- El caso del joven motociclista Christopher, asesinado a balazos por un elemento de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC-CDMX) en la avenida Fray Servando Teresa de Mier, dio un nuevo giro judicial. Un juez vinculó a proceso al oficial Julio “N” por el delito de homicidio calificado, aunque le permitió continuar el procedimiento bajo arraigo domiciliario.
El hecho, ocurrido el pasado 19 de agosto, generó una ola de indignación en redes sociales, donde circularon videos que exhibieron la brutalidad del enfrentamiento entre uniformados y civiles.
🔴 Nuevo video revela cómo comenzó la tragedia
El periodista Carlos Jiménez difundió recientemente imágenes que muestran a los hermanos Huerta y a su padre a bordo de dos motocicletas, siendo interceptados por policías para una revisión de rutina.
Según el material, los civiles intentaron huir y en el forcejeo incluso lanzaron una motocicleta contra un oficial, lo que desató una riña. Padre e hijos golpearon en repetidas ocasiones a los uniformados; en un momento, Christopher pateó en el suelo al agente Julio César “N”.
Fue entonces cuando, aún bajo los golpes, el oficial sacó su arma de cargo y disparó contra el joven de 21 años, quien murió al instante ante la mirada de testigos.
⚖️ Situación legal de los policías
Tras la audiencia, el juez resolvió que Julio “N” permanezca en prisión domiciliaria durante tres meses, mientras avanza el proceso judicial. En tanto, su compañero Luis Arturo “N”, acusado inicialmente de abuso de autoridad, quedó en libertad.
El caso mantiene encendido el debate sobre el uso de la fuerza policial en la capital y la respuesta ciudadana ante las revisiones de rutina, en un episodio que exhibe tanto la violencia contra la autoridad como los excesos en el actuar policial.
