AGENCIA
Nacional.- Tras reunirse con diputados federales en San Lázaro, productores de maíz expresaron su hartazgo por la falta de atención del gobierno federal y advirtieron que los movimientos agrícolas en los estados podrían retomar acciones de protesta, incluyendo bloqueos carreteros.
Mauricio Pérez, representante de productores de Guanajuato y hasta hoy vocero del Movimiento Agrícola Campesino, anunció su renuncia al cargo al considerar que los diálogos con las autoridades no han dado resultados.
“Ya nos cansamos de estar pidiendo tiempos, terminamos siendo los pendejos porque venimos a justificar posiciones de gente que no tiene ni la más mínima intención de ayudar, ni la más mínima sensibilidad de lo que está pasando en el campo mexicano. Esto no es nada más Guanajuato, son 24 estados de la República que estamos gritando y parece ser que estamos en un desierto, no hay eco, no hay respuesta”, declaró.
El dirigente señaló que los productores han cumplido con las mesas de trabajo y los llamados al diálogo, pero sin obtener soluciones concretas. “Ya lo que siga ya no nos corresponde a nosotros, creo que es momento de que el gobierno adopte su papel, sobre todo el secretario de Agricultura que es quien tiene que dar la cara y resolver los problemas”, agregó.
Pérez también criticó la falta de gestión por parte del titular de la Secretaría de Agricultura, Julio Berdegué, quien -según dijo- ha pedido a los productores elaborar cartas para exponer su situación ante la industria. “¡Chingados, nosotros no somos ni carteros ni escribanos! Para eso hay un secretario de Estado que debe hacer las gestiones necesarias”, reprochó.
Integrantes del Movimiento Agrícola Campesino reconocieron que se alcanzaron algunos acuerdos mínimos en la Cámara de Diputados, pero insistieron en la necesidad de establecer una mesa de trabajo formal con la industria para discutir los precios de garantía y mecanismos de comercialización.
Ante la falta de resultados, los productores advirtieron que podrían retomar los bloqueos carreteros en varios estados, como ya ocurrió en Guanajuato, donde previamente habían liberado casetas y peajes en señal de buena voluntad.
Pérez subrayó que hasta el momento no existe una respuesta “fehaciente y tangible” del gobierno federal ni de la industria para atender la crisis que atraviesa el campo mexicano.
