


Un mono araña fue asegurado por inspectores de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) en una finca del municipio de Coyuca de Benítez, luego de que una denuncia ciudadana alertara sobre su presencia en cautiverio.
Durante la inspección, la persona que tenía al ejemplar no pudo comprobar su legal procedencia, lo que derivó en su inmediata confiscación. El animal, perteneciente a una especie en peligro de extinción, fue trasladado a un sitio especializado donde se le realizará una evaluación física para determinar su estado de salud.
Posteriormente, será reubicado en un lugar que garantice su trato digno y adecuado, acorde con las necesidades de su especie.
La Profepa recordó que tener especies como el mono araña como mascota es un delito, ya que está protegido por la Norma Oficial Mexicana NOM-059-SEMARNAT-2010. Este reglamento establece que los animales exóticos solo pueden mantenerse en cautiverio si provienen de fuentes legales y cuentan con la autorización correspondiente emitida por la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), a través del trámite 08-056.
“No seas cómplice del tráfico de especies”, advirtió Profepa en un comunicado.
El mono araña enfrenta un grave riesgo de desaparición, principalmente debido al tráfico ilegal y la pérdida de su hábitat. Su venta clandestina y tenencia como mascota contribuyen a su declive poblacional en los ecosistemas del sur de México.


