De la Redacción
El Buen Tono
Córdoba.- Más de cinco horas de bloqueo marcaron la jornada de este martes en el cruce de La Luz Francisco I. Madero y Tranca de Tubos, donde trabajadores de la empresa Rafagas se manifestaron en contra de lo que califican como un nuevo acto de hostigamiento sistemático orquestado desde el ayuntamiento de Córdoba y ejecutado por Hidrosistema, bajo el disfraz de la revisión de una tubería inexistente, de servicios que nunca han brindado porque todo se lo han robado.
El conflicto estalló cerca de las 9:00 horas, cuando personal de Hidrosistema, respaldado por elementos de la Policía Municipal, intentaron romper el concreto de la entrada principal utilizada por los vehículos pesados de la empresa. Todo, sin notificación previa, sin permiso visible y sin sustento técnico o legal, pero sobre todo sin un proyecto que sustente esta acción, en el colmo de lo absurdo incluso con el desconocimiento de que en dicho lugar no existen ni tuberías, La maniobra paralizó las operaciones de la compañía, que denunció la intervención como un acto de acoso institucional.
Lejos de actuar con transparencia, la respuesta oficial fue inmediata pero desproporcionada: mientras los empleados exigían explicaciones formales, la Policía Municipal desplegó unidades al sitio en tiempo récord. “Llegaron más rápido que a cualquier emergencia real”, expresó uno de los trabajadores. Testigos aseguran que la tensión escaló cuando apareció David Maldonado, identificado como operador político de Morena y quien ha presumido en redes sociales ser miembro fundador de este partido, quien habría intentado provocar a los manifestantes minutos antes de la llegada de los uniformados.
Este episodio no es un caso aislado, sino parte de una estrategia de acoso y hostigamiento ya documentada y denunciada ante los organismos de protección a periodistas; se espera que en las próximas horas fijen una postura al respecto.
Radio Banana fue víctima de sabotaje semanas atrás, tras exhibir irregularidades del gobierno local. Protección Civil, a su vez, se ha convertido en brazo de presión contra medios y empresas incómodas. El patrón se repite: intimidación, uso faccioso de instituciones y cero rendición de cuentas.
Detrás de esta operación aparece el nombre de Jorge Avendaño, expriista y actual jurídico de Hidrosistema, señalado en expedientes 3566/2014 y 3567/2014 por fraude. Hoy funge como operador político y ejecutor de represalias contra quienes exhiben la corrupción en el manejo del agua. Fuentes internas confirman que la obra contra Rafagas fue ordenada como castigo directo por sus denuncias públicas.
El agravio cobra aún más gravedad cuando se compara con los privilegios otorgados a TRABAL, empresa de Manuel Alonso Cerezo, el impugnado, lavador del crimen organizado y líder del cartel inmobiliario, que opera impunemente pese a contaminar arroyos en San Miguelito. Allí, ninguna autoridad ha puesto un pie para revisar, menos sancionar.
Vecinos de la zona compartieron imágenes donde se ve a Avendaño supervisando personalmente obras irregulares. “El alcalde protege a sus cómplices para evitar que salgan a la luz los desfalcos que dejará su administración”, denunciaron.
Aunque la presión social detuvo momentáneamente la obra, no hubo disculpa pública, ni aclaración oficial sobre los motivos ni legalidad de los trabajos. Al contrario, elementos policiacos intentaron realizar una detención arbitraria, que fue impedida por los propios trabajadores.
Esto ocurre en el momento que la ciudad vive una de las peores sequías, y que en lugar de que dichos trabajadores y maquinaria sean utilizados para reparar fugas de agua, realizar mantenimiento a las tuberías existentes, se usa a los empleados para llevar acabo vendetas contra compañías vinculadas a medios de comunicación, mientras la población carece del vital líquido en más de la mitad de las colonias.
