Una jueza federal dejó sin efecto la suspensión definitiva que impedía la ejecución de la orden de aprehensión contra el exgobernador de Michoacán, Silvano Aureoles Conejo, lo que abre la puerta a su detención por parte de la Fiscalía General de la República (FGR).
Aureoles había conseguido un amparo que congeló durante dos meses la orden de captura en su contra; sin embargo, incumplió con los requisitos impuestos por la jueza Jovita Vargas Alarcón, del Juzgado Noveno de Distrito en Materia Penal, quien determinó que no se presentó ante la autoridad judicial ni cubrió la garantía económica de un millón de pesos.
“Se deja sin efectos suspensión definitiva… el quejoso Silvano Aureoles Conejo no cumplió las medidas de aseguramiento decretadas […] pues no exhibió la garantía económica establecida ni acreditó haber comparecido personalmente ante la juez responsable”, establece el acuerdo judicial emitido.
El exmandatario estatal enfrenta acusaciones por su probable responsabilidad en los delitos de peculado, operaciones con recursos de procedencia ilícita, asociación delictuosa y administración fraudulenta, en relación con un daño patrimonial estimado en 3 mil 412 millones de pesos.
Aunque Aureoles interpuso un recurso de revisión ante un Tribunal Colegiado, con el fin de obtener más tiempo para cumplir con las condiciones del amparo, la FGR ya está facultada para proceder con su detención mientras se resuelve dicha impugnación.
El caso marca un nuevo capítulo en los señalamientos de corrupción contra exfuncionarios estatales, y podría tener importantes implicaciones políticas si se concreta su arresto.
