Efraín Hernández
El Buen Tono
Fortín.- El alcalde, Gerardo Rosales Victoria, autorizó hacer una mezcla rudimentaria de chapopote, que arrojaron sin compactación ni base estructural sobre el camino que comunica a la unidad habitacional Las Flores con la Calzada Morelos; sin embargo, mintió al asegurar que se trataba de una pavimentación.
Vecinos denunciaron lo anterior, e indicaron que se trata de una muestra más del patrón fraudulento del presidente municipal, “dijo que rehabilitaría el tramo, pero sólo esparció material corriente”.
Denunciaron que el ayuntamiento repite la misma trampa, es decir, aparentar modernización urbana, mientras desaparecen los recursos destinados para obras viales.
Negaron que la intervención represente mejora alguna; por el contrario, descubre el engaño de una administración que se dedica a maquillar calles con materiales baratos, que incumplen con los estándares técnicos para robarse el dinero del pueblo.
Explicaron que el material es corriente, se adhiere de forma irregular y se desprende con el tránsito, “Rosales dejó claro que carece de voluntad para construir una superficie duradera”.
Las inconformidades también se dieron contra el director de Obras Públicas, Enrique Gaspar Falcón, a quien señalaron por operar junto al edil un esquema donde la simulación sustituye al trabajo real.
Culparon a los dos de autorizar procesos improvisados, alterar presupuestos y permitir que el dinero destinado para pavimentación auténtica termine en resultados fugaces que se desbaratan en cuestión de días o con la primera lluvia.
Con esta nueva intervención fallida, el camino hacia la Calzada Morelos se convierte en otro símbolo del deterioro institucional, un gobierno municipal que presume “pavimentaciones”, pero sólo arroja chapopote para disfrazar el saqueo, dejando a la población con vías frágiles, recursos evaporados y una creciente sensación de abandono.


